En 1994 le pusieron la k del punk al nombre de la heroína colombiana y debutaron en un colegio masculino dirigido por curas. Desde entonces, el trío femenino más célebre del under bogotano ha girado en torno a una propuesta con impronta decididamente contestataria. Tienen canciones grabadas en diferentes formatos, desde casetes hasta acetatos de siete pulgadas. Celebraron sus dos décadas de carrera musical el pasado mes de agosto, en la edición número 20 de Rock al Parque.