“No suena a clásico, suena a rap”: No Rules Clan y sus beats que reinventan la escuela
Entre las calles de Envigado hablamos con No Rules Clan sobre la honestidad del rap, los amigos y ‘Pantone’, su último disco que deja otra vez por lo alto las rimas y los beats de una generación sin reglas que no descansa.
Caminar por Envigado es respirar un aire más pesado pero limpio, repleto de árboles y con aceras diminutas que lo obligan a andar en línea recta y saludar a todos los que se cruzan por el camino. Envigado es escuchar una jauría de motos pasando al frente de su casa a cualquier hora, es tomarse un guarito en el parque, fumarse un barillo frente a la iglesia, parcharse una pola en la esquina hasta la madrugada, jugar billar los domingos tomando tinto. Son las librerías, las tiendas de tenis réplica y No Rules Clan.
Nuestra cita es a dos cuadras del parque en un nuevo spot que Kario One –un ingeniero civil que constantemente se entrega a las tornas y es uno de los DJs más reconocidos de Medellín–, está remodelando para abrir este viernes, aunque la alcaldía, la policía y los bomberos le ha estado cerrando la puerta a espacios que buscan dar un nuevo aire a la noche del sur del Valle de Aburrá. Mientras en la esquina la música popular revienta los parlantes y vende guaro desde las diez de la mañana, al DJ de No Rules le han puesto mil trabas para abrir este nuevo espacio, pues parece que a la institución en Medellín solo les gustan las fondas y las cantinas.
Entre cables, unas combipapas y un H2Oh para cuidar la línea, nos sentamos a charlar con No Rules Clan sobre el éxito de su segundo álbum, ‘Pantone’, una producción que para ellos ha sido un proceso de crecimiento de más de cinco años desde su álbum debut ‘Rap Nativo’, ese que los puso a figurar como uno de los referentes en el panorama nacional por sus rimas jocosas y los samples de música popular que los diferenciaban del resto de raperos que se quedaban con sonidos importados.
Después de organizar cables y clasificarlos entre útiles e inútiles, Kairo se sentó en medio del bar y comenzó a hablar de sus dos amigos Sison Beats (Isaac) y Anyone/ Cualkiera (Diego), sus parceros a los que describe como unos callejeros adictos al rap, un par de pelados envigadeños que prefieren irse caminando hasta la casa para poder echarse otra mediecita y seguir escuchando música.
Al bar sin pintar y lleno cajas por todos lados llegó Sison con un cigarro prendido, una camisa roja y unos Nike negros de cremallera. Ya sentado, pidió esa mescolanza entre tocineta, papas, salsas y queso tan famosas en la noche paisa. No ha comido nada desde el desayuno. Sólo una arepa y un vaso de Coca Cola, dice y uno puede ver que este Sison es el mismo que ‘por más rap que sea’ sabe que ‘borrachos todos perrean a oscuras’.
(Conozca ‘Los rumbos de No Rules Clan’)
Sison y Anyone (que tuvo que quedarse en la casa a causa de una gripa que pescó en Bogotá hace unas semanas cuando viajaron a la capital para lanzar su nuevo disco) coinciden en la importancia de la honestidad a la hora de hacer rap. Aunque mucho se ha hablado de lo “real” del rapero, ellos dejan claro que lo “real” no es lo callejero si no contar su vida de la manera más sincera con las herramientas que el mismo rap le da. Es ahí donde ellos sacan la casta, este álbum repleto de colores musicales diferentes, lleno de referencias a la calle, a echarse los plones, a parchar con los panas hasta que lo echen del chuzo y punches al mejor estilo del rap de competencia.
Su vida se pasa escuchando rap y caminando por las calles de Envigado, las mismas que están plasmadas en cada una de sus rimas. “Así no lo mencionemos siempre, si nosotros contamos una historia de nuestra vida eso está pasando en Envigado. Lo que nosotros hacemos siempre es rapear vueltas que nos pasan a nosotros. Por eso Envigado está presente siempre, estudiamos acá, nos enamoramos acá, lloramos acá”, contaba después Anyone.
Esas cantinas donde lloraron, el parque de Envigado donde se comieron los primeros helados, incluso El Callejón que ocupaba el espacio donde estamos haciendo la entrevista, son los espacios que construyeron una amistad blindada por el rap. Sison y Anyone se conocen desde séptimo y han estado conectados siempre por la música que les ha gustado y en este álbum se percibe esa conexión intima.
Todo este viaje de ‘Pantone’, cuentan, empezó una tarde en la sala de su amigo, el MC y productor Vic Deal. Sison y Kario cayeron a escuchar beats y Victor les mostró el de ´Give me the loop´. A ellos les gustó y se pusieron a escribir para sacar un tema juntos aprovechando que tenía el micrófono ahí para maquetearlos. Lo sacaron en una tarde y eso –con un regaño de Vic Deal incluído– los animo a concentrarse en volver a hacer música de los dos. Esa primera versión de ‘Give Me The Loop’, grabada en una sala fue la que quedó para el álbum final y fue la primera piedra de Pantone.
A la hora de hacer el beat de ‘NRS in da area’ ya estaban las letras sobre un beat que Kario encontró de Muggs y era necesario hacer uno así, “de esa calaña o mejor”, a la colombiana. Ahí nació el reto de crear algo que le diera un inicio con altura al disco, reto que implicó, según cuenta Sison la unión de varios productores, algo que no es tan común en el rap colombiano.
DJH, VicDeal y Sison se sentaron a pensar en ese beat que les hacía falta. Llevaban parchándose varias tardes escuchando beats y ya DJH y Vic estaban trabajando conjuntamente para lograrlo. Un día sacaron un beat muy bueno y Sison dio el toque final con un sample que se había pillado de una banda sonora de hace varios años. Con todo listo y montado empezaron a fantasear con los scratches que le podían hacer a ese beat sin darse cuenta de que ya habían encontrado lo que buscaban. Empezaron a cantar juntos un coro que Sison había sacado fumándose un cigarro afuera de la casa de Víctor. Ese era. Llamaron de una a Diego para que lo escuchara en el estudio y así quedó.
Solo puede entenderse la magnitud del álbum si miramos los beats que usaron para rapear, cada uno diferente al otro, pero de una factura muy alta gracias a su colaboración con algunos de los beatmakers más tesos de Colombia: Vic Deal, DJH, El Arkeólogo y el mismo Sison que están intentando poner en alto los beats colombianos en el hip hop.
(Conozca a ‘El Arkeólogo de los beats’)
Sison habla sobre su aproximación a otros géneros musicales que utilizan para enriquecer su sonido pero que no determinan su camino. “El mainstream tiene pegado estar mezclando bachata, salsa, trap, reguetón y a nosotros nos gustan esos géneros, pero de ahí a hacerlos es muy difícil. A nosotros nos mueve es el rap y por el mismo rap es que escuchamos otros géneros como la salsa o la música pa`planchar”, cuenta.
Hablando con ellos, uno nota el amor que le pusieron a cada uno de los temas, con cada uno fue un milagro, un escalofrío, una coincidencia y una profunda convicción por lo trabajado. “A veces hacer lo que uno ama tanto y ser tan radical en eso, se vuelve como contracultura porque ya la gente está pegada en mezclar otras cosas”, dice Kario One mientras decide que graffitis cubrir y cuáles destacar en su nuevo bar.
Pantone nace de la convergencia de muchos colores sonoros como lo dice el Nemesis (Sison) en ‘Pico y chao’: “Mira el rappa que dejaste, el que hace todos los colores como Faber Castell”. Una gama de colores en los beats que deja ver la cantidad de rap clásico que escuchan con referencias a Pharcyde o A Tribe Called Quest pasando por Yancey Boys y que muestra cómo están mirando también a los referente la new wave gringa como Westside Gunn, Al.divino o Roc Marciano.
El álbum es una oportunidad para que Sison, Anyone y Kario muestren toda la escuela que tienen detrás. Esa que los ha marcado, que los ha enamorado del rap y que ha llevado a que el trabajo de estos tres pelaos de Envigado este sonando en las emisoras bogotanas sin querer pegarse de las tendencias que tanto daño le hacen al rap que les gusta a ellos.
Aunque gracias a su amor por la escuela y la tradición se ha dicho que ‘Pantone’ sonaría muy noventero o viejo, Anyone y sus parceros tienen claras las cosas: “no es que el álbum suene clásico, suena a rap y para nosotros eso es lo único que existe”.