“Una contradicción chistosa. Como una especie de expresionismo pop”. Así describe su estilo Adalberto Camperos (Electrobudista). Influenciado por artistas como Egon Schiele o Edgar Degas, la estética del grafiti, el cómic y el manga, su trabajo muestra personajes deformados en la cotidianidad de la ciudad, con colores saturados, brillantes y un toque de humor.