La búsqueda insistente de la creación en la obra de Tonra

Encaramados en un andamio Tonra (31 años) me cuenta algunos detalles sobre la obra que está pintando en un muro de casi media cuadra de la parroquia San Pedro Nolasco, en la calle 69 con carrera 19. “Con el compañero Sako Asko se nos ocurrió crear una composición a partir del espacio y quisimos hacer un altar a la creación, a la capacidad creativa, pictórica e imaginativa de lo que somos”, explica sobre el mural en el que ha decidido incluir algunas referencias al pintor flamenco, El Bosco.

Esa afirmación describe muy bien a Tonra, un artista obsesionado de principio a fin con la creación. Para este manizalita que llegó hace dos años a Bogotá con la intención de darle inspiración y visibilidad a su obra, la creación es clave en su vida, tanto por el ejercicio de llevar a cabo las obras como por el disfrute que éste le produce. 

“Siempre he sido muy obsesivo con mi ejercicio. El hecho de ser muy constante con lo que hago es algo que ha marcado mi trayecto. Fue bien chévere encaminarme en esto hace unos nueve años cuando tuve mi primera experiencia con el arte urbano. Después fue tomando forma y me di cuenta que me brindaba demasiadas posibilidades que me dan una apertura diferente a lo que hago más socialmente”, señala, haciendo referencia a la interacción que puede hacer con el transeúnte cuando está en acción.

Mientras cursaba su pregrado en Artes Plásticas en la Universidad de Caldas, Tonra tuvo el chance de hacer un intercambio con la Universidad Autónoma de México (UNAM) donde conoció de cerca el muralismo. Este encuentro no solo lo motivó a pulirse a nivel técnico, también lo llevó a tomar la decisión de ponerle ruedas a su proyecto artístico en calle que ya cumple nueve años y cuya evolución ha sido constante. 

Su obsesión por su trabajo ha hecho que la obra de este artista siempre lleve algo de experimentación e improvisación, las cuales terminan dando esos toques que afinan cada una de sus piezas. En medio de ese proceso experimental, este creador y su obra han atravesado técnicas como la pintura acrílica, el óleo, el grabado, el linograbado, el aguafuerte y la fotografía, todas técnicas mediadas también por la exploración del color, algo que llama mucho su atención.

Así mismo la introspección es pan de cada día en el camello de este artista urbano, que todo el tiempo procura ver en su interior, de donde surgen las preguntas que componen el concepto de su obra. “Cuando uno empieza ese proceso introspectivo, empieza a cuestionarse cosas como qué somos más allá del cuerpo que habitamos, qué somos más allá de esos órganos, de ese pensamiento. Qué somos más allá de la existencia. Últimamente he llegado a la energía. Somos vibraciones; eso latente que está y que compone todo el universo. Eso es lo que hay detrás de ese cuestionamiento, de ese hacer estético y de ese placer”, dice.

 Dentro de la obra de Tonra, también hay una serie de retratos que este creador pinta en la calle sin ningún objetivo más allá que dejar plasmada en los muros a la gente que lo rodea. Artistas como La Muchacha, Skore, Mugre Diamante o Gavilán, personas que están muy cercanas a su quehacer artístico, hacen parte de esta serie en la que no solo pinta artistas sino también a parceros y personas muy cercanas a él. 

La constancia de Tonra lo ha llevado a ser invitado por grandes festivales del país entre los que se destacan el Pereira Querendona o Policromía, eventos que desde hace varios años se organizan en el Eje Cafetero. Cali, Sogamoso, Pasto o Florencia, son rincones del país a los que también ha llegado todo el poder y el color del arte de este virtuoso.

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El año pasado, en medio de la pandemia, su trabajo Divinidad lo hizo merecedor del premio JURADO de LatinoGraff, un evento que se viene gestando entre Francia y Latinoamérica desde 2016 gracias a Guayabo Colectivo, Cisart y con el apoyo de la Fundación Cartel Urbano y cuyo eje central es el neo muralismo latinoamericano. Gracias a este encuentro cultural cuyo objetivo es reivindicar el arte que se hace en este lado del planeta y llevar esta reivindicación al encuentro con el ciudadano francés, Tonra podrá llevar una serie de diez obras a exposición al país europeo. Así podrá enfrentar su trabajo a latitudes con miradas y perspectivas distintas. 

“Poder llevar una expo fuera de Colombia me tiene muy contento por el hecho de recibir otra mirada aparte del contexto en el que vivimos. El hecho de empezar a moverme en otros circuitos y que LatinoGraff sea ese motor y ese apoyo, me parece fundamental”, dice este creador.

Tonra, además, hace parte de dos crews: APC, una banda llena de talento conformada por artistas de muchos lugares del mundo y VFC (Vida-Fuerza-Calle) en Manizales, un grupo de amigos interesados en rayar, crear y confabular, que con el tiempo han dejado de moverse activamente.

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Y es que, si bien el grafiti ha sido cercano a este artista desde hace varios años y hasta se le ha medido a tirar algunas letras, él cree que lo que él hace es lejano al grafiti tradicional cuyo componente principal es la acción vandal. “Me encanta pintar letras y aunque no me considero realmente grafitero, siento que el grafiti va más allá de pintar letras, de pintar en la calle y de usar el aerosol. Me parece una posición frente a la vida, una postura política. Realmente admiro mucho a las personas que de verdad lo hacen. Es un mundo que me encantaría seguir explorando también y adentrarme un poco más en él”, agrega al respecto. 

Por ahora, dentro de sus proyectos personales, tiene pensado alimentar un canal de YouTube a punta de videos en los que quiere mostrar algunos tips que ha aprendido en su proceso en la pintura. La manera en que ve la mancha y el color, la realización de murales y las técnicas que utiliza en su trabajo, son algunos de los temas que espera exponer en estos productos audiovisuales que planea realizar junto a un equipo de trabajo conformado por la artista De la Calle Valentina, la productora Diana Valbuena y Camilo Peralta, quien cumplirá el rol de director audiovisual. Así mismo, entre sus planes también está una serie de talleres presenciales que ha venido realizando con el propósito de compartir el conocimiento. Los talleres son de pintura, aunque también se plantea realizar uno de linograbado y de diferentes técnicas que le apasionan un montón. 

“La idea siempre es creer y crear en equipo. Para mí es muy importante poder desarrollarme socialmente también a partir de la creación”, concluye. Esta frase sintetiza a este tipo apasionado por las distintas técnicas que maneja y por transmitir su conocimiento a más personas que quieran meterle la ficha a esta vuelta. Por lo pronto, Tonra no va a dejar de impregnar su obra en la calle, una tarea que empezó hace 9 años pero que no tiene fecha de caducidad. 

Siga a Tonra en su Instagram y en su canal de YouTube que allí va a empezar a subir material audiovisual dando tips de pintura. Manténgase atento también a las redes de Cartel Urbano, donde vamos a estar dándole pistas para ganarse un pin de Tonra.