‘La Vorágine’ ya tiene adaptación en cómic
El primer proyecto editorial del sello bogotano Resplandor Editorial es una novela gráfica adaptada de la obra de José Eustasio Rivera. Hablamos con el escritor Óscar Pantoja para conocer un poco más del proceso de producción de este cómic.
La Vorágine, 92 años después de su publicación, sigue siendo un referente de la literatura latinoamericana y prueba de eso es la versión cómic que lanzó el 17 de noviembre la editorial bogotana Resplandor Editorial. En la producción de este proyecto –el primero de Resplandor- participaron el escritor Óscar Pantoja, autor de la novela gráfica Gabo, memorias de una vida mágica, el ilustrador José Luis Jiménez, dibujante del cómic Los Once de la editorial Laguna Libros y la investigadora Paula Ávila.
Para montar el guión de esta obra, Óscar se sentó a leer y releer varias veces la novela de José Eustasio Rivera, también vio videos y leyó crónicas; solo así pudo entender el universo construido por el escritor colombiano. “Hoy en día lo habitual en nuestra crítica literaria es hablar de La Vorágine con un poco de timidez, pedir disculpas, como diciendo ‘perdonen lo poquito, esto es lo que tenemos’. Esto lo que refleja es el enorme provincianismo de nuestra crítica literaria porque evidentemente estamos ante una obra maestra en clave universal”, cita Oscar a Carlos Páramo, antropólogo de la Universidad Nacional.
La adaptación se facilitó pues La Vorágine pasó al dominio público hace unos años, quedando libre de derechos de autor. Al momento de escribir el guión lo que más se le dificultó fue adaptar el lenguaje barroco que muchos han criticado de la obra original a la jerga actual. “Hasta ahora estamos atreviéndonos a hacer novelas de largo aliento y el cómic ya no es el lenguaje que entretenía a los chicos, sino que está a la par de las grandes novelas, eso también me anima para ser muy libre y conciliador”, dice.
Por su parte, José Luis ilustró el contexto real de los lugares que describe la novela, y con fotografías que varias personas enviaron de la selva, un aspecto en el que fue importante el trabajo de investigación visual de Paula Ávila. El libro cuenta con tres gamas diferentes: clara, oscura y muy oscura, lo cual facilita sumergirse en la narrativa. “La selva en el libro es una brutalidad porque el ser humano la convirtió en el proyecto de esclavitud y de la explotación de los recursos del caucho, que con la mano del hombre se convierte en un infierno”, afirma Óscar.
Si quedó con ganas de comprar la novela, la puede encontrar en Tango Discos y Libros, y muy pronto estará en todas las sedes de la Librería Nacional del país y en Panamericana..