Gordo Sarkasmus o los herejes del rap

“Inhalo mis anhelos y exhalo humo del bueno” – Mateo Granuja

“Tu fe la inventó otro humano y yo no tengo fe en la especie” – Zof Ziro

Les molesta el rap sin vocación, “las rimas con infinitas comillas”, las letras planas que al parecer lo único que quieren es complacer al público con melodías pegajosas y comerciales.

¿Qué es lo que hace diferente al dúo paisa Gordo Sarkasmus del resto de raperos colombianos? Podría decirse que es el filo de sus trovas y esa alta carga irónica que sueltan en cada tema:

Parecen llevar un estilo de vida sin muchas pretensiones: en la última visita que hicieron a Bogotá, hace un par de días, se hospedaron en una casa grande y vieja sin lujos, con colchones en el suelo, dos gatos, una hamaca atravesada en la mitad de la sala, un sofá y, claro, una buena bolsa de bareta. Tal vez el único lujo de este sitio que vale la pena resaltar es un cuadro de Pez Barcelona que hay colgado en la pared.

Mateo Granuja y Zof Ziro, los dos integrantes de Gordo Sarkasmus, andan sin ninguna bisutería extravagante colgando del cuello (como el imaginario colectivo del bling-bling hip hop nos haría pensar). Visten camisetas estampadas, bermudas o pantalones anchos y sus respectivos Reebok Pump. Todo el tiempo están botando rimas a diestra y siniestra, así sea sentados en el sofá o mientras se bañan… tal vez para no perder eso que llaman flow.

Herejías, su más reciente disco, es un álbum lleno de sátira, humor y crítica. “Este trabajo tiene el mismo pensamiento que La Patria Boba (disco anterior), pero la composición de las letras, los beats y toda la producción fue mejor”, comenta Granuja.

Desde el título hasta el arte del disco, diseñado por Iconblast, fueron pensados para llevarle la contraria a todo tipo de dogmas, no solo religiosos, también políticos y sociales.

Aunque la música de Gordo Sarkasmus es contestaría, nunca deja de ser entretenida. En Herejías, por ejemplo, hay numerosas referencias a personajes que todos conocemos. “Escribo sobre mi vida y sobre todas esas cosas que han intervenido en ella –asegura Mateo Granuja-. Las caricaturas siempre estuvieron presentes en mi niñez, y aunque algunas eran hechas para adultos todos las veíamos. De ahí saqué la ironía y sarcasmo”.

Es normal encontrar en sus rimas celebridades de la ficción como Darth Vader, Bugs Bunny o Condorito. Ziro, en ‘La Gran Estrofa’, dice: “es para idiotas / como los nuevos de Los Simpsons”. También existe, entonces, una crítica a la televisión actual.

Atacan de frente el rap conciencia, el subgénero del hip hop que termina aconsejándonos cómo vivir y dando tips de superación personal. Esas rimas emocionales son blanco de burla para ellos. “El rap no es eso. Realmente es un man calidoso que quiere decir algo y tiene las habilidades para hacerlo”, asegura Zof Ziro, quien en la canción ‘Coma y punto’ lanza esta frase: “su rap maricón puede ser la canción de Leonisa”. Mateo lo plantea de la siguiente manera en la canción ‘Marranos y esmeraldas’: “El que usa el discurso de la escena tiene Síndrome de Down / Cultura, unión / eso es basura / yo no represento una región (…) / Esta no es la alianza de los hombre del señor”.

“El género ha perdido su esencia –asegura Ziro-. La gente no transmite lo que piensa, se guían por los gustos del público y por eso terminan sacando puras vainas bailables”.

Una extraña habilidad para complementarse musicalmente hizo que Gordo Sarkasmus naciera sin que Mateo y Ziro se dieran cuenta. Comenzaron a componer rimas en 2010, después de que Granuja fuera al estudio casero de Ziro para grabar unos temas como solista.

Desde el inicio congeniaron y poco a poco fueron escribiendo material propio. Entonces descubrieron casi por accidente que ya tenían bastantes canciones juntos. “La letra que traía uno la completaba el otro y así nos salió todo. Un día le dije a Granuja que le pusiéramos un nombre… y así nació la banda”, recuerda Ziro.

Sin duda son las rimas y el nutrido vocabulario las características más notorias de Gordo Sarkasmus, pero aseguran que primero hacen los beats y sobre esa base musical escriben. “En otros países la gente no tiene ni idea de lo que dicen las letras, pero por el ritmo de la canción se la gozan”, dice Granuja.

A ellos se han unido otros grupos de Medellín con principios similares y miles de seguidores, como Doble Porción, No Rules Clan (lea aquí ‘Los rumbos de No Rules Clan’) y Páez. Juntos formaron el parche Moebiuz, nombre del estudio de Zof Ziro, ese proyecto en el que estaba trabajando antes de comenzar a rapear con Granuja. Moebiuz no tiene un número de integrantes definido ni tampoco van juntos a todos lados.

Son una suerte de familia musical. Meten beats y rimas en discos de otros con la intención de elevar el nivel y crear un delicioso salpicón lírico; por ejemplo, Granuja compuso la base de ‘Calle Morgue’, una canción de Métricas Frías incluida en Serenata sin Mariachis. Gordo Sarkasmus invitó a Sanix, a Mañas Ru Fino, a N.Hardem (escuche aquí la entrevista rapeada con este músico) e incluso al grafitero Skore999 para que participaran en Herejías.

Este gordo del rap paisa también está metido en asuntos políticos. En ‘Lo que sea’, Mateo Granuja dice “La bandera de Colombia está manchada de semen”. Pero ¿cuál es el argumento de Granuja para asegurar esto?: “Colombia es una zorra que se le acomoda al mejor postor –dice Granuja-. Nuestros gobiernos se le arrodillan a Estados Unidos y a Europa y no importa si son de izquierda o derecha, todos son la misma güevonada”.

La bareta siempre está presente en sus letras: “Sufrimos el azar del meridiano psicotrópico / fumamos las cosechas de un país narcótico / No es mi culpa que la tierra y las semillas tengan algo casi erótico / y nazca un cannabis tan exótico”.

Estos herejes del hip hop nacional seguirán "rapeando con la piedad de Chucky", hiriendo suceptibilidades y cantándoles verdades en la cara a más de uno, así que si usted es de oídos sensibles es mejor que pase de canción. Y de artículo.