
Un mes para subirle volumen al jazz
No somos un país de costumbres “jazzeras”, sin embargo, este mes de septiembre se organizan, en varias ciudades, eventos especializados en un género que ha servido de base para grandes músicos colombianos. Un breve recorrido por la escena jazz de Bogotá y el país.
Siempre ha sido una de las principales escuelas del rock y la salsa (entre muchos otros géneros) gracias a su exigente estructura musical. A pesar de que en la actualidad no es un género mediático, el jazz sigue contagiando a músicos y personas del común.
Se pueden encontrar notables influencias en producciones contemporáneas nacionales: escuchar, por ejemplo, el disco ‘Voyage’, del beatmaker colombiano Crudo Means Raw (un hombre más bien enfocado en la escena hip hop), es deleitarse con una excelente curaduría de ritmos jazzeros.
En Bogotá, no es extraño dar con “agujeros” en los que músicos aficionados y profesionales se reúnen a improvisar sobre pistas de Miles Davis, Charlie Parker, Tito Puente o Mongo Santamaría.
El jazz tiene toda clase de seguidores en este país: desde los más intelectuales conocedores de la música negra, hasta los primíparos de carreras relacionadas con la creación musical, quienes buscan, entre toneladas de sonidos antiguos, una nueva voz.
La oferta de sitios para disfrutar de este género musical en la capital colombiana experimenta un crecimiento lento. Podemos hablar de Bolón de Verde, en el Chorro de Quevedo, y del San Café, en el barrio Palermo, espacios que intentan mantener vivo el espíritu de los clubes negros de Nueva Orleans, con presentaciones de artistas cada semana.
Otro sitio fundamental para ir a escuchar músicos “jamear” sobre largas escalas cromáticas, es el Cuban Jazz Café, un restaurante/bar que le anda apostando a las presentaciones en vivo. También existen espacios de salsa, rock, blues o tango que incluyen jazz en sus playlists: Smoking Molly, Matik-Matik, Trementina, Storyville, Casa de Citas.

Parece que estos lugares quieren seguir el legado de otros que fueron parte importante para la expansión del jazz en la ciudad y que ya no existen, como Hippocampus, Fredys, Doña Bárbara, El Jazz, Zanzíbar, El Jazz Bar 93…

Por otro lado, el nivel de los músicos nacionales dedicados a este virtuoso género musical va en ascenso. La Big Band Bogotá (creada y financiada por Idartes), por ejemplo, reúne a 15 de los músicos más duros del país.
“La Big Band cada año trae propuestas interesantes, novedosas y al mismo tiempo pertenecientes a la corriente de la música colombiana —explica Ricardo Jaramillo, director desde hace cuatro años de la Big Band Bogotá—. Este será nuestro quinto año consecutivo en Jazz al Parque y no pensamos defraudar al público: tendremos solistas muy buenos y tocaremos canciones colombianas nuevas, eso sí, adaptadas al mejor estilo del jazz”.
Sin embargo, Jaramillo sostiene que la oferta jazzera nacional no debería reducirse a un solo mes y que “sería mejor si pudiéramos tener presentaciones durante el primer semestre del año. Otra cosa son los espacios, hay muy pocos lugares donde se toca jazz y es necesario que haya más iniciativa para abrir nuevos lugares. También es fundamental que la ciudadanía cree el hábito de ir a eventos pagando”.
Otro de los referentes de este género en el país es Antonio Arnedo, quien, según el escritor Juan Carlos Garay, fue el primero en grabar un disco de jazz en el país (Macumbia, 1984). La música de este saxofonista, egresado del Berklee College of Music, mezcla el jazz con la riqueza musical de Colombia.
“Esta música íntima es el reflejo de esos contactos tan humanos y directos. La gaita de la Costa Atlántica, la marimba de chonta del Pacífico; el tiple de la Región Andina, la percusión de las costas y las flautas del Cauca son protagonistas de este repertorio. Ellos nos aproximan al timbre característico de nuestra nación y por ello son eje fundamental de Colombia", le dijo Antonio Arnedo a El Espectador en el 2002.
Ya es costumbre que en Septiembre el jazz recorra Colombia a punta de festivales, algunos de ellos relacionados a continuación:
Jazz al Parque (19 y 20 de septiembre)
Año tras año, el Parque Metropolitano el Country es la casa de este festival gratuito. En sus 19 ediciones, JAP ha presentado músicos de la talla de Mike Stern, Macy Gray, Steve Coleman, Maceo Parker y Cassandra Wilson.
Festival Internacional de Jazz del Teatro Libre (2 al 27 de septiembre)
Artistas colombianos y extranjeros se presentarán en la vigésimo séptima versión de este evento. Las big bands Urpi Barco y Sintropía (de las universidades UNINCCA, El Bosque y Sergio Arboleda) están entre las apuestas nacionales. Los invitados internacionales serán The Bad Plus (USA), Danilo Pérez Trío (Panamá), Javier Colina y Tico Arnedo (España y Colombia) y Till Brönner Quintet (Alemania).
Medejazz (24 de septiembre al 10 de octubre)
El Festival de Jazz de Medellín llega a su décima novena edición con un cartel nacional e internacional de lujo: Samuel Torres Jazz Capital (Colombia, Italia, Perú y Holanda), Lavo Ensemble (Israel), Poncho Sánchez y su orquesta de jazz latino (USA), Eddie Palmieri Salsa Orquesta (USA y Puerto Rico) y el reencuentro del Conjunto Clásico junto a Tito Nieves.
Barranquijazz (23 al 27 de septiembre)
Nuestra costa no es solo vallenato; desde el 97 el jazz se apodera de Barranquilla con excelentes músicos. Este año la nómina de invitados está encabezada por Norig (Francia), Cool Caos Jazz (Colombia y España), Ensemble Lavo (Israel) y Edy Martínez Trío (Colombia). Esta edición le rendirá un homenaje a la Fania, por eso contarán con la presencia de José Feliciano, Ismael Miranda y Adalberto Santiago.
Pastojazz (21 al 25 de septiembre)
La tierra del cuy y del Carnaval de Negros y Blancos se ha dejado contagiar de las jam sessions desde 2001. En esta nueva versión llegan artistas de la talla de Danilo Pérez Trío (Panamá, USA), Phillipe Sellam Trío (Francia), Fernando Sor Jazz Ensamble (Colombia) y Michael Fleiner con el Septeto Internacional (Suiza).
Ajazzgo (22 al 27 de septiembre)
Aparte de la buena salsa y el chontadurito, Cali también es jazz (al menos durante septiembre). Varias generaciones de músicos estarán presentes en este festival: José Feliciano Sextet (Puerto Rico, USA), Poncho Sánchez and His Latin Jazz Band (USA), Haga que Pase (Colombia), Jazz Gamblers (Colombia) y Eddie Palmieri Salsa Orchestra (USA).
Mompox Jazz Festival (2 y 3 de octubre)
Aunque no es en septiembre, es este el festival de jazz más importante de Bolívar, el cual ya llega a su cuarta versión. Este evento recibe más de 12 mil asistentes cada año. En sus tres versiones se han presentado músicos como La 33, Alfredo de la Fe, Mompox Jazz Experience y ChocQuibTown.
Aparte de estos festivales, habrá conciertos de artistas nacionales e internacionales para tener en el radar: el saxofonista francés Guillaume Perret se presentará junto a The Electric Epic el 24 de septiembre en el Teatro Colsubsidio; otro saxofonista francés, Phillipe Sellam, estará con su trio en el Liceo Francés el 25 de septiembre; los colombianos de Chaskij tocarán en la Biblioteca Luis Ángel Arango el 24 de septiembre; el 29 de septiembre, la francesa Norig tocará con su cuarteto en la Universidad de los Andes; y, el 16 de septiembre, Antonio Arnedo se presentará con La Casa, un proyecto del Colectivo Colombia: junto a él estarán otros duros del jazz, como Lucía Pulido, Julián Gómez, Hugo Candelario, Juan Miguel Sosa, Daniel Sosa, Santiago Sandoval y Jorge Sepúlveda.
Puede que el jazz no haga parte de nuestras raíces culturales y musicales, sin embargo, sí que ha servido como influencia de muchas bandas colombianas. Péguese un viaje todo septiembre… uno de saxo, contrabajo y guitarra.