Hace un par de semanas abrió sus puertas una nueva propuesta gastronómica en pleno corazón de la zona universitaria de la calle 40. El Ciervo y el Oso hace parte de la nueva corriente de bistronomía que consiste en ofrecer alta gastronomía sin caer en ningún tipo de pretensiones ni exageraciones; esta es una apuesta sincera, sencilla y sabrosa en un lugar de un ambiente cálido y pequeño, como un bistró francés.