La Alegría Resiste y Yuma Despierta son dos iniciativas que usan el arte urbano y la música para hacerles frente a la pérdida de fauna y flora y a la contaminación del agua, producidas por proyectos como el de la represa del Quimbo. Junto a las comunidades indígenas, Malegría, Nómada, Daniel Ávila y otros artistas, han intervenido los muros con aquellos elementos que les dan vida a las regiones afectadas.