Entre las propuestas que se recibieron para la primera edición de Perro Ruidoso, un evento que incentiva el intercambio de experiencias en la creación y gestión musical se destacan un colectivo feminista de música electrónica, una banda que narra historias con temas experimentales, una revista en la que puede decir lo que se le dé la gana, una plataforma postpunk y hasta un ilustrador que juega con la psicodelia.