Muros de Bogotá, Soacha y Sumapaz, tatuados por la verdad
Hasta la fecha, este corredor cultural está integrado por 11 intervenciones artísticas en espacios rurales y urbanos de Bogotá, Soacha, Sumapaz, donde las reflexiones y deseos de no repetición del conflicto armado están plasmados, permitiendo abrir ventanas al presente y el futuro para comprender el pasado y evitar repetirlo.
Muros de veredas, calles y avenidas en Sumapaz, Soacha y Bogotá, fueron intervenidos por víctimas del conflicto, campesinado, juventudes y responsables, para simbolizar sus reflexiones sobre los hechos de la guerra que han impactado sus vidas y territorios, convirtiéndose al tiempo, en expresiones urbanas que también abre ventanas al presente y el futuro para comprender el pasado y evitar repetirlo.
El ´Corredor por la Verdad´ liderado por la Comisión de la Verdad a través de la macro territorial Bogotá, Soacha, Sumapaz, es una iniciativa de diálogo social que integra a diversos actores sociales, quienes a través de construcciones colectivas le dan lugar al arte urbano para hacer memoria sobre lo ocurrido en sus territorios en el marco de la guerra y así, reivindicar diversas acciones de resistencia por la paz y la verdad.
Hasta la fecha, este corredor cultural está integrado por 11 intervenciones artísticas en espacios rurales y urbanos de Bogotá, Soacha, Sumapaz, donde las reflexiones y deseos de no repetición del conflicto armado están plasmados, permitiendo abrir ventanas al presente y el futuro para comprender el pasado y evitar repetirlo.
Este corredor invita a emprender un viaje por Sumapaz, un territorio situado en el centro de la Cordillera Oriental, a sentir el frío que recorre sus tierras fértiles, cañones, ríos, quebradas y lagunas que se conectan para alimentar el centro del país, siendo una región que ha resistido entre la estigmatización y la búsqueda de la paz.
La colonia, semillero de paz
En la vereda La Colonia del municipio de Villarrica, la comunidad campesina del Oriente del Tolima, entre colores, osos y caballos, plasmó su deseo por una ruralidad libre de violencia con el mural ´La Colonia, semillero de paz´.
El mural simboliza cómo sus acciones son semilleros de paz, pese a que en la historia de este territorio están los orígenes del conflicto armado del siglo XX, las bombas de napalm que fueron lanzadas desde el aire durante el año 1955 y los impactos de la toma guerrillera de las antiguas Farc - Ep.
Territorio de arte y letras para las nuevas generaciones
En Icononzo, Tolima, este mural cuenta los deseos que tienen las víctimas y la comunidad icononzuna por transitar hacia la reconciliación y construir un territorio lleno de arte y letras para las nuevas generaciones.
El municipio de Icononzo tiene en su historia el dolor que dejó la guerra conservadora durante la época de la violencia, en su puente natural cientos de liberales fueron arrojados al precipicio por pensar diferente. Los paramilitares, el ejército nacional y la antigua guerrilla de las Farc - Ep, también generaron grandes afectaciones en la ruralidad y el casco urbano.
El abrazo de la verdad
En el centro de Fusagasugá, capital de la provincia de Sumapaz, el mural 'El abrazo de la Verdad' trae a la memoria a quienes fueron asesinados durante el conflicto armado e invita a abrazar la posibilidad de transitar hacia una Colombia en paz.
La ciudad de Fusagasugá, ha sido testigo de los impactos del conflicto armado en la ruralidad, siendo víctima de la estigmatización, la entrada del paramilitarismo y el asesinato de integrantes de la Unión Patriótica.
El álbum de la verdad
En el municipio de Silvania, región de Sumapaz, sus habitantes a través del mural ´El álbum de la verdad´ piden ser reconocidos por la sociedad colombiana y que su historia sea conocida. El mural cuenta esas historias de campo y la voluntad de paz de este territorio.
En el imaginario de la sociedad está la idea de que Silvania al ser un municipio cercano a Bogotá no vivió los impactos del conflicto, pero la antigua guerrilla de las Farc - Ep y dos estructuras del paramilitarismo generaron múltiples violaciones a los derechos humanos de las y los habitantes.
Nunca más parir para la guerra
En San Juan de Sumapaz, localidad 20 de Bogotá, este mural es un homenaje a la memoria de las víctimas de ejecuciones extrajudiciales e integra en su nombre la consigna que las mujeres de Sumapaz llevan proclamando desde hace varios años.
En la región del Sumapaz se presentaron varios casos de ejecuciones extrajudiciales, más conocidas como ´falsos positivo ́. En la localidad 20 de Bogotá, el Ejército asesinó y presentó como bajas en combate a Wilder y Javier Cubillos Torres, Víctor Hilarión Palacios, Chucho Delgado Morales, Helvir Torres y Duver Celeita. Este mural rinde homenaje a ellos, a sus familias y a la comunidad que pide nunca más parir para la guerra.
Nuestra lucha es por la vida, mantenemos su legado
En la vereda Santa Rosa, de la localidad 20 de Bogotá, este mural rinde homenaje a Fanny Torres, Fernando Morales y Guillermo Leal, ediles del Partido Liberal que fueron asesinados entre el 2008 y el 2009 por las antiguas Farc - Ep, hecho que marcó a la comunidad de la cuenca del Río Blanco.
¿Dónde están? Caso Colectivo 82
Cada pincelazo, rostro plasmado y palabra escrita, simbolizan la lucha del Caso Colectivo 82 y la búsqueda por la verdad de lo ocurrido con las 13 víctimas de desaparición forzada entre marzo y septiembre de 1982.
Es así, como este mural exige saber ¿Dónde están?, integrando mensajes escritos del puño y letra de los familiares, rindiendo homenaje a todos los detenidos desaparecidos del Caso Colectivo 82, entre ellos 9 estudiantes de la Universidad Nacional, la Universidad Distrital y el Colegio Gonzalo Bravo Páez.
Construyamos juntos la paz para nunca más ir a la guerra
Firmantes del Acuerdo de Paz viajaron desde diferentes partes del país y junto a víctimas del conflicto armado, pintaron en la localidad de Bosa un mural por el respeto a la diferencia, el derecho a una vida en paz y el valor de la verdad.
Cultiva Verdad
En la frontera entre Ciudad Bolívar y Soacha, jóvenes de la Red Somos Generación de Verdad, alrededor de una olla comunitaria y un espacio de diálogo expresaron sus apuestas en común frente a las distintas realidades vividas en sus territorios, con el objetivo de impulsar y articular esfuerzos para garantizar el derecho a la verdad, en relación con las violencias actuales y pasadas contra la juventud.
No parimos hijos pa`la guerra
En cada pincelada, trazo y fotografía plasmadas por las integrantes de la organización Madres de víctimas de falsos positivos (MAFAPO), se abre paso a los recuerdos y a las resistencias de estas mujeres, quienes han luchado por la verdad y la justicia de las 6.402 víctimas de ejecuciones extrajudiciales en Colombia. Este mural es una intervención de arte urbano ubicada en la autopista sur y tiene como objetivo la reivindicación de la memoria de hijos y hermanos.
El ´Corredor por la verdad´ es resultado de la estrategia de diálogo social donde el arte urbano abre 11 ventanas al pasado para observar de frente lo vivido y evitar repetirlo.
Esta iniciativa de muralismo y arte urbano continuará “tatuando” más muros, para seguir reafirmando el valor de la verdad como un bien público e involucrar a la sociedad colombiana sobre la importancia de comprender y apropiar el Informe Final que entregará la Comisión de la Verdad en junio de 2022.
La Comisión de la Verdad agradece a las organizaciones, comunidades y colectivos sociales de arte que hicieron parte de la construcción de estas expresiones de arte urbano. (Macondiana, Darwin Hernández, willoom, Shamu Acosta, Ancu, Lu Patiño, Camila Cifuentes, Camila Gongora, el ECICP, Beligerarte, Dark Moon Studio y Beruska tv).
