No se trata solamente de resolver obras arquitectónicas con materiales ecológicos, asegura el bioconstructor colombiano Lukas Vargas en esta entrevista. Se trata de una consciencia generalizada de consumo, de construir un espacio que voy a habitar, de usar las manos, de entrar en contacto con la tierra y de trabajar en equipo.
A 40 kilómetros de Bogotá, en el municipio de Granada, la Universidad de Sabiduría Ancestral abrió una sede que ofrece cursos para los interesados en agroecología, cocina ancestral o geometría sagrada. Sus postulados, contrapuestos al espíritu mercantil que ven en las principales universidades del país, se oponen a la búsqueda del éxito material, la competencia feroz y la producción extractiva.