“La mala relación que tengo con el negocio de la música”: Alejandro Paz

Mientras vivió en Madrid, Paz decidió dedicarse de lleno a la música. En 2012 lanzó su primer EP, Free, en el que se incluyó ‘Duro’, una canción que no solo corea el público durante los conciertos, también en las rumbas de los distintos clubes de la ciudad. Alejandro Paz también dicta talleres sobre producción musical.

Este artista se queja de las ventas de discos y admite que no vive de esa clase de transacciones sino de sus presentaciones. Anda trabajando en la creación de un sindicato para enfrentar las medidas de PROFOVI (el equivalente chileno de SAYCO), quienes, asegura Paz, le quieren cobrar a los DJs chilenos regalías por tocar las canciones registradas en esta corporación.

Tu último trabajo fue producido en conjunto con el francés La Mverte. ¿Cómo se dio esta colaboración?

El trabajo con La Mverte surgió de la participación en el Red Bull Music Academy. Estuvimos juntos en Tokyo y teníamos algunos amigos en común. Aunque no nos conocíamos directamente se nos hizo evidente que teníamos que trabajar juntos y comenzamos rápidamente. Nos encerramos todo el tiempo que pudimos y así empezó todo.

Pero no fue esta la primera colaboración que hiciste. Antes ya habías trabajado con Matías Aguayo y el sello Cómeme…

Con Matías todo surgió porque teníamos amigos en común, en Chile. Gracias a ellos nos conocimos y comenzamos a trabajar juntos. Y bueno, con Cómeme comencé mi carrera y lancé varios trabajos. Pero el trabajo con el sello concluyó hace un año, más o menos.

¿De dónde salen tus letras? ¿Son experiencias tuyas o de amigos? 

Son experiencias mías, por ejemplo ‘Duro’ surgió de un problema con la cocaína; tampoco le quiero hacer una apología a la coca, pero obviamente quería escribir lo que me pasa cuando la consumo. Son esas cosas que le pasan a todo el mundo pero nadie dice nada.

Ahora ando escribiendo mucho sobre la mala relación que tengo con el negocio de la música. Las resacas morales de levantarse un domingo en la mañana pidiendo perdón me dan para escribir letras.

Pero también escribo sobre cosas más esperanzadoras y con una idea inocente, como mi canción ‘El House’, que habla sobre cuando sea viejo y todavía pueda salir a festejar con mis amigos. En realidad son cosas básicas.

Ya que hablaste de ‘El House’, he escuchado que es una canción que a ti no te gusta mucho.

Más que no gustarme, es que la he cantado mucho. Llega un momento en el que siento que tengo que dejar de cantarla. Se hizo bastante popular, salió en una cosa de MTV que se llama ‘Acapulco Shore’. Me carga pero también es parte de desprenderse de las cosas.

¿Cuál de tus canciones simplemente no puedes dejar de tocar?

Probablemente ‘El House’, porque me la piden y me la piden. Eso está bien. Me gusta el oficio de DJ, es una cosa en la que tienes que dialogar. No es como una concepción de artista al que no le importa lo que le pase al público. En la fiesta el público es el protagonista, yo solo lo conduzco.

Artistas chilenos que nos recomiendes...

Recomiendo a un amigo que se llama Diegors, un muy buen DJ. También me gustan mucho Andrea Paz y algunas cosas de los Discos Pegaos, Roman & Castro. Ahora me están llegando algunas cosas de Dj Vivi, quien tiene unos temas muy locos. Viví muchos años afuera y cuando regresé a Chile me tocó enfrentar una generación nueva, de gente que no conocía, de veinteañeros relocos. Y me encanta.

Cuando tengo tiempo libre o viajo no escucho techno. Me gustan mucho los boleros. Escucho la música de Lucho Barrios, me hace pensar en mi casa. Últimamente ando escuchando algunas cosas nuevas como The Chicas, que ya es un poco más movido.

¿Te gusta algún artista colombiano? 

Tengo algunos amigos de Medellín, entre ellos Dany F. Me gusta mucho lo que hace y nos la llevamos muy bien. De Bogotá también tengo algunos músicos conocidos que también han hecho cosas muy interesantes en sus producciones.

¿Has pensado en hacer algo con alguna banda o DJ colombiano?

Siempre hay la posibilidad de hacer lo que sea, aunque es difícil por el tiempo y el enfoque que se le quiera dar. Para tener música hay que tener tiempo y para que pase eso tengo que quedarme por acá algunos días, para hacerlo en otro ritmo. Por ahora ando más enfocado en la clase de activismo musical. De hecho con unos amigos estamos haciendo un sello que se llama ‘Disco Pato Carlos’ y estamos editando temas por ahí.