El arte de los oprimidos, una mirada al conflicto árabe - Israelí

El conflicto entre Israel y Palestina es uno de los más largos y difíciles de entender de la historia contemporánea. Comenzó a finales del siglo XIX y se ha mantenido hasta la actualidad, su inicio se dio con la migración judía a Palestina, que en ese momento estaba gobernada por el Imperio Otomano. Al mismo tiempo, surgió el movimiento sionista, cuyo objetivo era establecer un Estado judío dentro de Palestina, pero los arabes, con justa razón, se oponían a esta idea.

Esta disputa por la tierra nació del reclamo de ambos pueblos a un supuesto “derecho histórico” sobre el territorio. Por su lado los Israelíes descienden del antiguo pueblo hebreo y creen que este territorio les fue asignado por Dios y los palestinos descienden de los filisteos que han habitado el territorio hace más de 3000 años. Como lugar sagrado encontramos a Jerusalén, el cual tiene un profundo significado religioso tanto para judíos como para musulmanes, y el control sobre estos lugares santos ha sido una fuente de conflicto por decadas.

Después de la primera oleada de inmigración de judios hacía palestina en 1882 y 1903, llegó una segunda oleada de inmigrantes judios en 1904 como respuesta a la persecución que vivían en Europa y que terminaría años después, con el genocidio realizado por el régimen de la Alemania nazi, en el que cruelmente, la misma Europa que hoy apoya las acciones de opresión por parte de Isrrael hacía el pueblo palestino, sometia al pueblo judio a realizar trabajo forzosos en campos de concentración, en los que al final eran asesinados sistemáticamente en las cámaras de gas.

Con la caida del Imperio Otomano y en manos de El Reino Unido, en 1917 se emitió la Declaración Balfour, que expresó su apoyo a la creación de un "hogar nacional para el pueblo judío" en Palestina, pero esta decisión solo incrementó las tensiones entre ambos pueblos. Durante el mandato británico se produjeron disturbios y enfrentamientos entre judíos y árabes. El Reino Unido se tuvo que enfrentar a la resistencia de ‘Haganá’ una organización paramilitar creada por los judios, así como, posteriormente enfrentar los atentados de ‘Irgún’ organización paramilitar sionista (terrorista) que se derivó de ‘Haganá’ y que buscaba que se recociera a Israel como un Estado.

Finalmente El Reino Unido, decidido por abandonar el territorio en 1947, acató la sugerencia de la ONU de dividir Palestina en dos estados, uno judío y otro árabe, lo que llevó a la guerra de 1948-1949 y al inicio del conflicto actual árabe-israelí.

Los judios crearon Las Fuerzas de Defensa de Israel (con apoyo Estadounidense), lo cual hasta hoy se mantiene, y así, empezaron a ocupar y apoderarse del territorio al mejor estilo del colonialismo, con avanzadas militares y asentamientos judios en tierra palestina. En la Guerra de los Seis Días, Israel capturó Jerusalén Oriental, Cisjordania, Gaza y los Altos del Golán, lo que aumentó significativamente la ocupación israelí en estos territorios. 

Durante los años posteriores se intentó múltiples veces hallar soluciones al conflicto, pero en medio de una palestina empobrecida, separada y limitada en sus derechos humanos más básicos, versus un Israel convertido en potencia militar que sigue ocupando territorios de forma ilegal y limitando el tránsito de los palestinos, a quienes ni siquiera considera ciudadanos, no hay muchas opciones dignas.

La primera Intifada

La ocupación israelí de Cisjordania, Gaza y Jerusalén Oriental desde la Guerra de los Seis Días en 1967 generó la frustración entre la población palestina. Las restricciones, robo de tierras y otras políticas israelíes, sumado a las difíciles condiciones de vida en los territorios ocupados, incluida la falta de oportunidades económicas y la pobreza impuesta al pueblo palestino, generó una ola de manifestaciones que le dieron la vuelta al mundo, con vídeos de niños y jóvenes tirando piedras a los camiones militares israelies que respondian con fuego.

En diciembre de 1987 en la Franja de Gaza inició la primera Intifada. El detonante directo fue un accidente de tráfico en el que un camión militar israelí chocó con un vehículo palestino, matando a cuatro palestinos en Gaza. Esto desató una ola de protestas y disturbios.

Israel respondió a las protestas con medidas represivas, que incluían toques de queda, detenciones y el uso de la fuerza. A medida que avanzaba la Intifada, la confrontación se tornó más violenta, con un aumento de atentados y enfrentamientos armados. Así surgió el Movimiento de Resistencia Islámica HAMAS en 1987, apoyado por grupos islámicos palestinos, y se desarrolló en gran medida como respuesta a la ocupación israelí y al proceso de paz en curso.

La Primera Intifada finalizó en 1993 con la firma de los Acuerdos de Oslo, que establecieron un proceso de paz entre Israel y la Organización para la Liberación de Palestina (OLP). Sin embargo, estos acuerdos no sirvieron de mucho. Desde 2007, Hamas ha gobernado la Franja de Gaza. Esto ha llevado a una división política y territorial entre Gaza y Cisjordania, lo que complica los esfuerzos por la unidad palestina.

En la actualidad Hamas está considerada como una organización terrorista por varios países, como Estados Unidos y la Unión Europea. Sin embargo, ha recibido apoyo político y financiero de países como Irán y Catar.

Los acontecimientos actuales en 2023 han puesto de nuevo en el mapa, el conflicto, el pasado 7 de octubre, Hamás (organización terrorista), dio un golpe militar en el territorio israelí, acción que surgió después de varias intimidaciones que se venían presentando por parte las Fuerzas Armadas de Israel a las manifestaciones y celebraciones religiosas por parte del pueblo palestino. Este ataque que tomó por sorpresa a Israel y que dejó múltiples asesinatos, secuestros y acciones con suma crueldad a la población israeli, ha generado una respuesta contundente y violenta de Israel hacia la franja de Gaza, privandolos una vez más de suministros, mientras los ataca indiscriminadamente. 

Las redes sociales, noticieros e influencers se han abalanzado a internet para intentar entender el fenómeno, un esfuerzo escaso, cuando la postura de occidente dirige su mirada a convertir a uno de los pueblos en el malo y a los otros en los santos del conflicto. La única verdad es que con esta guerra los más afectados son la población civil que queda en fuego cruzado, personas de ambos pueblos que están siendo privados de sus derechos fundamentales, de sus hogares, de sus familiares y de su territorio.

La cárcel más grande al aire libre

Como era de esperarse desde 2007, Israel ha impuesto un bloqueo sobre la Franja de Gaza, controlando estrictamente la entrada y salida de sus más de dos millones de habitantes palestinos, con el objetivo de “limitar el flujo de armas y municiones” hacia el territorio (Pero restringen mucho más que eso). Este bloqueo ha tenido un impacto significativo en la economía y calidad de vida de los palestinos en Gaza, al restringir el ingreso de alimentos, medicamentos y materiales de construcción y al someter a constantes humillaciones a la población palestina que debe pedirles permisos para todo: incluyendo permisos de construcción en su propio territorio y los cuales nunca les son otorgados, demoliciones de sus hogares para asentamientos judios y restricción de agua y electricidad debido a la limitación de los suministros de combustible.

Este bloqueo ha limitado la movilidad de los residentes de Gaza, lo que dificulta la posibilidad de viajar para recibir atención médica o visitar a familiares en Cisjordania. Los palestinos están presos en su propio territorio, están presos al aire libre, pero sin poder recibir ayuda, porque hasta las ayudas humanitarias, Israel las restringe.

Resistencia artística

La opresión al pueblo palestino ha traido consigo multiples manifestaciones artísticas de resistencia en busqueda de justicia, identidad, reinvindicación de sus derechos, visibilidad del conflicto desde la perspectiva de los oprimidos y la libertad por la que llevan luchando mas de 70 años.

Dentro de las expresiones artísticas de resistencia encontramos poemas de Mahmoud Darwish, Samih al-Qasim y Fadwa Tuqan, tres poetas palestinos que narran desde los versos el dolor del exilio, la pérdida de la tierra y la muerte que silencia al pueblo Palestino. Desde la música encontramos artistas como Marcel Khalife, Le Trio Joubran y el grupo de rap DAM que cantan sobre búsqueda de justicia en sus canciones.

Películas como ‘Paradise Now’ y ‘Omar’ han retratado la crudeza del conflicto entre múltiples documentales como; ‘5 Broken Cameras’ en el que conocemos a Burnat, un agricultor palestino, mientras documenta la resistencia no violenta en el pueblo de Bil'in a través de cinco cámaras dañadas en confrontaciones con las fuerzas israelíes; ‘The Wanted 18’, combina animación y entrevistas para contar la historia de 18 vacas, que se convirtió en un símbolo de resistencia en un pueblo palestino; ‘The Occupation of the American Mind’, este documental analiza cómo se percibe el conflicto israelí-palestino en los medios de comunicación estadounidenses y cómo la narrativa influye en la opinión pública y ‘Naila and the Uprising’, narra la historia de Naila Ayesh, una activista palestina que desafió la ocupación israelí y el patriarcado durante la Primera Intifada.

Uno de los artistas palestinos más recordados por su sátira e inteligencia con el lapiz es Naji al-Ali, un caricaturista palestino conocido por su trabajo político y social. retrató durante años la situación de los palestinos y los desafíos que enfrentaban bajo la ocupación israelí, en el periódico Al-Qabas en Kuwait. Sin embargo su resistencia artística terminó el 22 de julio de 1987 en Londres, Reino Unido, después de varias amenazas de muerte que llevaron como resultado un atentado en el que le dispararon en la cien.

Caricatura de Naji al-Ali. Imagen tomada de Al Jazeera.

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Su mítico personaje Handala, (un niño de 10 años palestino de espaldas, con las manos cruzadas detrás, como símbolo de la resistencia y la lucha del pueblo palestino.) es dibujado constantemente en los muros de segregación que ha construido Israel contra palestina:

La poesía fue el escape para Mahmoud Darwish considerado uno de los más grandes poetas árabes del siglo XX. Nacido el 13 de marzo de 1941 en al-Birwa, cerca de la ciudad de Akka, que ahora se encuentra en Israel. Fue refugiado tras la guerra árabe-israelí de 1948 y vivió en el exilio durante gran parte de su vida debido a la ocupación israelí de Palestina. En su poesía abordó el exilio y su deseo de retorno a la patria. Falleció el 9 de agosto de 2008 en Houston, Texas, debido a complicaciones médicas. 

A la agrupación DAM, le sigue los pasos MC Abdul, un niño rapero que en sus letras cuenta el flagelo que viven los palestinos en un tierra ocupada. En 2021, con 12 años de edad, hizo su debut con la canción “Shouting at the Wall” acompañada de un vídeo grabado en la Franja de Gaza, que muestra la continua destrucción de su pueblo y que se ha hecho viral en 2023 en medio del estallido de la guerra entre Israel y Palestina.

Por último, pero no menos importante, hablemos de "The Freedom Theatre" una compañía de teatro palestina con sede en el campo de refugiados de Jenin, en Cisjordania. Fue fundado en 2006 por Juliano Mer-Khamis, un actor y director de teatro israelí-palestino. A través del teatro crean resistencia cultural para jóvenes palestinos. Su arte se ha convertido en catalizador del contexto y en una forma de alzar la voz como método de expresión artística.

Por estos días de rostros pequeños e inocentes llenos de tierra, que sobreviven a las bombas, de padres que se sientan en medio de los escombros en lo que antes estaba la sala de su casa, días en los que las enfermeras salen en vídeo a pedir clemencia y humanidad, días en los que mueren médicos y conductores de ambulancias mientras intentan salvar vidas, y vemos en vídeo a una chica mostrar cómo se ha caído su ventana junto con el edificio vecino, es fácil aferrarnos a la rabia, a la ira colectiva, a señalar a unos y otros no, es fácil, porque el odio se propaga más rápido que la búsqueda de soluciones pacíficas y sobrepasa nuestro entendimiento. Tal vez, lo más sensato para comprender un conflicto, sea abrazar el arte de los oprimidos.