
La insignificante vida cotidiana (en viñetas) de ‘El chico cabello de pan’
Está tan deprimido que sus reflexiones resultan bastante ocurrentes y divertidas. Les presentamos a un ser empalagosamente melancólico que aún no sale del clóset y que desde hace cuatro años cuenta su vida en Bogotá a través del cómic.
Graduado como tecnólogo en Diseño Gráfico y ahora cursando séptimo semestre de Artes Plásticas, Jonathan Arévalo es la mente detrás de El Chico Cabello de Pan. Y aunque esto se aleja un poco de su trabajo como ilustrador, decidió apostarle al mundo del cómic con un personaje melancólico que en muchas situaciones es el reflejo de su creador. Este deprimido ser lleva desde 2013 contando su cotidianidad en Bogotá a través de viñetas por medio de Tumblr. Ahora hace apariciones en Instagram.
El Chico Cabello de Pan (El Chico Cabello de Gorra desde que se “calveó”) es un man pesimista que aún no ha salido del clóset y que quizá en algún momento de su vida gris lo haga. Artista frustrado que solo tiene una meta en la vida: llevar depresión al mundo por medio de sus historias monocromáticas acerca de su día a día en la capital. Quizás a usted no lo deprima sino por el contrario se divierta con sus desgracias.
Acérquese un poco más a la vida de este drama queen:
Pero no todo es tristeza y desazón. A veces en la obra de este ilustrador el amor triunfa… y lo puede hacer de maneras que a la abuelita camandulera o al tío homofóbico no le terminen de cuadrar.