El año pasado, este grafitero colombiano y los muralistas Mazatl y Kill Joy intervinieron los territorios de la comunidad Lenca, de la cual hacía parte la líder indígena Berta Cáceres, quien fue asesinada. Ahora esos murales estarán en formato de serigrafías –también de Mazatl y Kill joy- y parte del dinero recaudado será destinado a la resistencia de estas poblaciones.