El hospital de la ciudad de Nanjing, en China, acaba de incluir en su gama de equipos una máquina que facilita el método de extracción de los fluidos seminales. El aparato funciona como una especie de masturbador u ordeñador automático.

La medida responde a que China carece de donantes de esperma, a pesar de ser el país más poblado del mundo. Así mismo, es muy alto el porcentaje de las personas que fallan en las pruebas iniciales de donación de esperma. Por tanto, el extractor de semen busca aumentar las tasas de donantes para suplir los problemas de fertilidad de una parte de la población.

Según el director del departamento de urología del hospital de Zhengzhou, la máquina está ideada para los pacientes que no sean capaces donar semen de la "manera tradicional", es decir, únicamente con sus manos. 

El extractor de semen cuenta con un tubo que se ajusta al tamaño del pene de cada usuario. La velocidad, la frecuencia, la amplitud y la temperatura son también graduables. Además, cuenta con una pequeña pantalla en que la que se muestran películas que ayudan al hombre a acelerar el proceso de extracción.

El precio de la máquina es de 2.800 dólares, y sus vendedores aseguran que ofrece a los usuarios un sentimiento muy placentero. 

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