
TRES DÉCADAS SUDANDO LA CRESTA
Entre 2007 y 2009, David Viola publicó I.R.A. La Antileyenda y Punk Medallo. En septiembre de este año lanzó su tercer libro, Aguante I.R.A. 30 Años de Punk. En él, el guitarrista y vocalista de la banda paisa retrata con especial cuidado la historia de un grupo que lleva tres décadas tirándole tomates podridos a los estatutos patriarcales. Al sumergirse en estas páginas el lector se encontrará con historias de giras brutales por Suramérica, presentaciones en Nueva York y hasta el romance entre David y Mónica.
Por Camila Ussa Villamil
Fotos por Julián Gaviria
Imágenes del libro cortesía de Mónica Moreno
"Para poder ser verdaderos Punks han puesto como norma la pobreza, pero no cumplen, pues no viven con austeridad, de hecho derrochan el tiempo, la salud y compran porquerías, su pobreza es de la mente.”
David Viola.
La banda arrancó en los ochenta siguiéndole los pasos a Complot, la primera agrupación punk en Medellín. Aunque su nombre significaba en un principio "Ideas de Revolución Adolescente", con el tiempo pasó a ser “Infexion Respiratoria Aguda”, ya que para ellos el concepto de revolución fue mal interpretado por muchos y la adolescencia definitivamente ya había pasado.
Por el bagaje punk registrado hasta hoy, David Viola, guitarrista y vocalista de la banda, lanzó el pasado 19 de septiembre su tercer libro, Aguante I.R.A. 30 Años de Punk, en el que cuenta con pelos y señales la historia de su banda.
Uno de los temas que abarca Viola en este texto es el imaginario colectivo que se crea al ver una banda reconocida. "Mucha gente cree que porque reconocen nuestras caras y música en unos cuantos medios (…) ya cogimos el cielo con las manos y nuestra cuenta bancaria se llenó". Frente a esto, la banda ha decidido "blindar el cerebro y el cuerpo", como asegura Viola en el libro, para no permitir que los rumores los destruyan.
Este libro, de 157 páginas, es un proyecto en el que Viola trabajó un buen tiempo. "Cada día de esos casi cinco años trataba de buscar un espacio de veinte minutos o dos horas para seguir escribiendo”, asegura el músico. Anécdotas como la agreste gira por Suramérica, los tres toques en CBGB New York, su romance con Mónica Moreno y diferentes problemas relacionados con derechos de autor, hacen parte de las páginas que narran todo el trabajo y caminos que han recorrido como artistas latinoamericanos.
Después de escribir las primeras líneas, Viola entró en un estado de reminiscencia que le permitió traer miles de detalles de la vida de la banda al libro. "Trataba de acomodar bien los textos, pulirlos un poco con la excelente ayuda de Mónica, ya que los primeros borradores quedaban muy salvajes y si se publicaban a la loca podían herir susceptibilidades".
Cuando el autor habla sobre las finanzas de la banda, dice: "Tal vez preferirían vernos arrastrando un costal por las calles, expuestos a la misericordia de los transeúntes, viviendo en un cuartucho y tomando alcohol antiséptico mezclado con cualquier porquería barata". David asegura que los instrumentos de marca que usan han sido proporcionados por un patrocinador. "Lo que conseguimos para nuestra manutención lo hacemos con el sudor de nuestras crestas. No existen los fajos de billetes que supuestamente han caído del cielo"
I.R.A. es hoy un patrimonio de cultura punk que se sigue desarrollando desde la independencia y por medio de la autogestión. "La historia del libro y la de I.R.A. son prácticamente iguales, llenas de resistencia, perseverancia, cruentas batallas culturales y mucho punk", comenta David.
Aprovechando esta celebración, la banda lanza su producción discográfica número 11, I.R.A. PURA, que contiene 21 canciones; 18 de ellas inéditas y 3 que hacen parte de importantes compilados.
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