Uno de los más destacados MCs de España estará en Bogotá este 11 de noviembre.

A Nach (Ignacio Fornés Olmo) le cuesta responder cómo llegó al hip hop. Más que algo deliberado, fue una casualidad.

“Yo siempre digo que el hip hop me eligió a mí. No puedo explicar como empecé en la música, las cosas fueron sucediendo de manera natural y cuando me quise dar cuenta estaba trabajando de pleno en esto”, afirma el rapero de Albacete, España.

En 1994 lanzó D.E.P (su primera "maqueta"), pero no fue sino hasta En la brevedad de los días (1999), su primer álbum, que se dio a conocer por sus letras desafiantes llenas de crítica social.

Nach ha estado nominado a premios como los MTV Europe Music Awards y los Goya. También logró estar 52 semanas consecutivas entre los más vendidos de España, algo poco usual para un artista de rap en Europa.

Mejor que el silencio es su sexto y más reciente álbum, que describe como “un paso muy grande en mi evolución creativa".
Vino a Bogotá en 2008, en el marco de Hip hop al parque, y regresa este 11 de noviembre para presentarse en el Teatro Metropol.

¿Qué nos puedes contar de  Mejor que el silencio?

Es tal vez el disco en el que más colaboraciones he tenido,  con invitados como El Chojin, Madnass, Rapsusklei, Zpu o Abram. También a artistas legendarios de fuera de mi país como Talib Kweli e Immortal Technique de los Estados Unidos, o Akhenaton de Francia.

Es el disco más coral y con más invitados a todos los niveles que he hecho jamás, tanto a nivel vocal como musical. Estoy muy satisfecho con el resultado.

El mundo se ha fijado en España por los cambios sociales que ha sufrido en los últimos años. ¿Qué tanto de esto se ve reflejado en el disco?

Lo que menciono en el disco sí hace referencia a España, aunque no es el tema principal.  Veo cambios sociales y políticos en todo el mundo, cómo los políticos nos tienen mal ubicados y cómo los gobernantes pretenden pasar por encima de la gente. Para mí es igual de importante lo que sucede en mi barrio a lo que sucede al otro lado del planeta. 

Todos estamos llenos de contradicciones. Yo inclusive, porque estoy en el sistema, tengo un i-Phone e internet como todo el mundo y es normal, pero trato de dar mi voz y decir lo que pienso.

Son muchísimas cosas que veo tanto en España, como en el resto del mundo, y fueron las que intenté plasmar en este disco.

El rap ha pasado de ser un género marginal a conquistar cada vez más audiencias dentro del llamado “mainstream”. ¿Qué piensas de esto?

Bueno, sí, creo que cada vez hay más propuestas que pretenden hacer fórmulas comerciales, algunas muy valiosas, otras tediosas, otras que se acercan más al pop. Internet se ha convertido en un espacio fuerte para dar a conocer nuevos grupos y es difícil conocerlos a todos.

No tengo problema con que haya propuestas más comerciales con mezcla de otros géneros, pero para mí lo más importante es llevar un mensaje. Así es como concibo el hip hop y como me nace hacerlo, pero no soy nadie para decirle a otros lo que tienen que hacer. 

No me gusta encasillarme dentro del género hip hop o música urbana, me gusta creer que hago música para seres humanos, sin importar su edad, raza, religión o clase social.

¿Cuáles fueron algunos de los artistas que más te marcaron como artista?

Recuerdo mucho el disco Licensed to Ill de los Beastie Boys, y también a Run DMC. Ahora Era difícil conseguirlos en esa época, no es como ahora.

Soñábamos con rapear. Si cuando era un niño me dicen que voy a sacar discos y a hacer conciertos no me lo hubiera creído nunca.

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