No todos los días llega una leyenda del rock a nuestro país. Sucederá el próximo 20 de mayo, con la presentación del exintegrante del icónico grupo The Ramones, Marky Ramone y su banda Marky Ramone’s Blitzkrieg, en el teatro Las Vegas Nevada. 

Por Paula Ricciulli

Salió de la banda por borracho, en 1983, y estuvo fuera de ella durante cuatro años. No fue el baterista original, pues llegó para remplazar a Tommy Ramone, en 1978. Sin embargo, Marky Ramone es el único integrante vivo de la alineación más longeva de The Ramones, que duró quince años y conformaban además Dee Dee, Joey y Johnny. Marky es el encargado de preservar el legado musical y contracultural de una de las agrupaciones más importantes en la historia del rock. 

Pero Marc Steven Bell, su nombre de pila, no siempre fue un Ramone. Inspirado en sus héroes musicales Ringo Starr y Keith Moon, en 1972 fundó Dust, su primera banda, y un año después pasó a Estus. En 1976 formó Richard Hell & the Voidoids, considerada pionera en el punk. En ella fue baterista hasta 1978, cuando Dee Dee Ramone (Douglas Glenn Corvin) le pidió participar en su banda, en el legendario bar CBGB. 

Llegó a The Ramones pocos meses antes de la grabación del disco Road to Ruin (1978), que incluye el himno punk I Wanna Be Sedated. Como baterista de The Ramones participó en más de 1700 conciertos durante quince años, hasta que la banda dijo ¡Adiós, amigos!, en 1996. 

Por mujeres, y por política (Marky y Joey se consideraban demócratas, mientras que Johnny y Dee Dee se identificaban con la derecha), existían ciertos roces entre los integrantes, pero como lo explicó el propio Marky a Cartel Urbano, “durante estos años se han sobredimensionado los sentimientos y emociones normales de personas que están juntas todo el tiempo. Los conflictos son inevitables, pero casi todo el tiempo nos reíamos y divertíamos. Nos encantaba tocar y generalmente éramos muy felices”. 

Como el propio Marky lo explicó a la revista NME, nunca pensaron que influenciarían a nadie. Su única intención era hacer música que les gustara y alejarse de la lucha de egos de la industria musical de la época. No buscaron que sus jeans rotos se convirtieran en una tendencia de la moda, simplemente no tenían plata para comprar pantalones nuevos. Aun así, son la segunda mejor banda de la historia, después de Los Beatles, según la revista Spin, y uno de los cincuenta mejores artistas, de acuerdo con Rolling Stone. En 2002 fueron incluidos en el Salón de la Fama del Rock. 

“El punk cambió la industria para mejor. Inspiró a la gente a hacer música, sin preocuparse por lo que estaba de moda o era aceptado”, complementa Marky, que cuando la banda llegó a su fin se unió a Dee Dee Ramone en su proyecto en solitario y en The Ramainz, donde interpretaban canciones de The Ramones por diversión, hasta la muerte de Dee Dee en 2002. Marky Ramone and the Intruders, Marky Ramone and the Speedkings y Teenage Head fueron otros de los grupos creados por él. También estuvo en la gira del vigesimoquinto aniversario de Misfits. 

Se presentará en Bogotá, México, D.F., Santiago, entre otras ciudades de Latinoamérica, con su nueva banda Marky Ramone’s Blitzkrieg (su favorita entre todas en las que ha estado), que también integra Michael Graves, de Misfits. Tocarán 32 canciones de The Ramones, además de otros temas originales. If and When es su más reciente sencillo. 

Cuando no está tras la batería en alguna de sus bandas, diseñando una línea de ropa o creando su propia receta de salsa para pasta, a Marky Ramone le gusta leer libros de aventuras y biografías. Es un fanático de la ciencia ficción: Alien es una de sus películas favoritas y tiene una colección de más de trescientos robots. Alguna vez afirmó que leía los titulares del New York Times sólo para tratar de entender por qué alguien habría votado por George Bush hijo. 

Actualmente es DJ del programa Marky Ramone’s Punk Rock Blitzkrieg, de Sirius/XM Satellite Radio. Con 54 años y 33 grabaciones, es casi seguro que no pasará un día en la vida de Marky Ramone en el que deje de tocar, sentir y respirar punk. “Si puedes tener una carrera en la que te guste lo que haces, tienes mucha suerte, así que nunca te rindas”, es la mayor lección que ha aprendido en poco menos de cuarenta años de carrera musical.