El profesor Ethan Kross de la Universidad de Michigan, Edward Smith de la Universidad de Columbia y sus colegas, analizaron imágenes cerebrales de personas que han sufrido rupturas amorosas y comprobaron que este tipo de episodios pueden afectar regiones del cerebro que están dedicadas al dolor físico.

No es una metáfora, los seres humanos sí pueden experimentar dolor por amor y aunque el tema despierta recuerdos amargos en muchos, el Museo de los Corazones rotos abrió sus puertas hace seis años para recibir esos objetos y regalos que marcaron relaciones del pasado. 

Allí se exhibe desde una prótesis donada por un militante de guerra que se enamoró de su fisioterapeuta, hasta un hacha con la que una mujer en Berlín destruyó los muebles que le recordaban a su ex pareja. A la lista se suman fotografías, cartas de amor, juguetes sexuales, vestidos de novia, recipientes llenos de lágrimas, anillos y cientos de objetos que son exhibidos en este museo ubicado frente al Ayuntamiento de Zagreb en Croacia. 

La idea fue producto de la ruptura entre Olinka Vistina y Drazen Gubisic, dos artistas croatas que tras su separación en el 2006, decidieron fundar este espacio como una alternativa para separar bienes sentimentales. La inauguración oficial se llevó a cabo en el 2010 con 700 objetos aproximadamente y desde entonces parejas de todo el mundo han hecho llegar sus contribuciones. 

Las piezas desde hace más de cuatro años han protagonizado una exposición que ha viajado por 19 países de América, Europa y Asia y ahora sus fundadores pretenden ampliar una sección virtual “ya que los recuerdos de hoy son cada vez más digitales. Pocos escriben hoy a mano una carta de amor. Hay recuerdos en forma de mensajes telefónicos, de fotos digitales (...) y en la parte virtual de nuestro museo esos recuerdos pueden ser guardados" afirman. 

Por ahora les formulamos la pregunta obligada: ¿Cuál sería ese objeto que donaría al Museo de los corazones rotos?. Envíenos una foto con su recuerdo amoroso a pgongora@cartelurbano.com 

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