
Seis fanzineras que están alimentando la escena alternativa nacional
Estas mujeres de Bogotá y Medellín se han dedicado a dar forma a interesantes proyectos editoriales en los cuales la ilustración, el collage y la literatura son fundamentales. Cada una con un estilo particular, Nefazta, Rapiña, Aburrideitor, Sara Serna, María Camila Duque y Dany Table Boat son algunas de las chicas más activas de la escena del fanzine.
En Bogotá y Medellín la ilustración y los fanzines pasan por su momento más productivo. Estas ciudades tienen una larga tradición en ese tipo de publicaciones y cuentan además con ferias y otras iniciativas que permiten la circulación de información y material.
Estas seis fanzineras han contribuido a la escena alternativa de sus ciudades por la constante actividad en torno al tema, también por su interesante trabajo, que es referente no solo en Colombia sino en el exterior.
Nefazta
Nefazta es el alter ego de Johana Navajas, una ilustradora y diseñadora de Bogotá; ese personaje, una versión suya propia con antifaz negro, es en realidad la excusa para explorar los rincones más personales de su mente y su gusto por la estética “kawaii”, esa de donde provienen las ilustraciones japonesas tiernas, redondas y melosas.
Aunque empezó con un proyecto de costura en el año 2010, su fuerte sin duda es la ilustración: dibujos de objetos pequeños y cotidianos en tonos rosas y pasteles. Sus personajes, a veces objetos animados, son puestos en situaciones íntimas y un poco tristes, cursis o melancólicas, que permiten que nuestro lado más ñoño y sensible se identifique con ellos.
En 2013 pasó de las fotocopias de sus dibujos, que regalaba en el colegio, a los fanzines coloridos y en formatos pequeños. Ahora, está en la búsqueda de llevar sus ilustraciones a temas poco comunes, como la historia social del cabello o los productos que provienen de la matanza de ballenas.
Rapiña
Es una de las más activas de la capital. Como ilustradora tiene un estilo muy característico. En 2009 dejó la fotografía y empezó a llenar libretas y papeles con animales de colores chillones y llamativos. Aunque inocentes en apariencia, sus personajes están inspirados en la fauna típica de la urbe, en la jerga popular y en las palabras divertidas, sonoras e incluso groseras.
En septiembre de este año expuso en Perú. Su muestra ‘HUCA’, preparada especialmente para esta invitación, es una mezcla entre indígenas y extraterrestres: adaptó las máscaras que usan las comunidades amazónicas y se las puso a sus personajes, haciendo alusiones también a elementos alienígenas.
Sus trabajos aparecieron primero como colaboraciones para fanzines de amigos, pero con el tiempo empezó a hacer los suyos propios. También ha organizado ferias de venta e intercambio de “zines” y tiene una jugosa colección que ha alimentado durante más de diez años.
Este año, en vez de dejar todas esas publicaciones comiendo polvo en una caja, las puso a viajar por el mundo. Así nació ‘La maleta fanzinera’, un proyecto que busca poner a rodar fanzines colombianos por diferentes ciudades del país y América Latina. Si de casualidad usted hace fanzines, puede donar un par de copias aquí.
Aburrideitor
Mezcla en su trabajo todo tipo de técnicas artísticas, desde ilustración hasta instalaciones que exploran temas tan variados como el internet, los memes, la brujería y el feminismo.
Cercana al punk por algunos de sus amigos, la música nunca le interesó lo suficiente, pero en cambio la impronta “hazlo tú mismo” le abrió los ojos: la idea de que cualquiera puede publicar y autoeditar su propio trabajo, exponerlo y venderlo, fue una puerta hacia la libertad que se abrió a través de los fanzines.
Aunque influenciada por el cómic subterráneo sesentero de Robert Crumb y por la línea compulsiva de Vincent Van Gogh, Aburrideitor se reconoce a sí misma como una hija de su tiempo, por eso la “cultura del internet” hace parte de su trabajo: crea memes, a veces con su propia cara, sobre situaciones típicas de la posmodernidad y del drama social, pero que detrás esconden una aguda crítica.
Los episodios cotidianos, los pensamientos íntimos y los objetos triviales que pinta guardan una pregunta: ¿quién soy?, la cual también la lleva a cuestionar lo que damos por sentado con respecto a los roles y el género, por eso el feminismo es como una bandera en su trabajo. Ha colaborado con proyectos de fanzines y arte en todo el mundo, pues aunque localmente no suena tanto, Aburrideitor es reconocida afuera por tomar una posición clara y abierta, necesaria aunque poco común, en estos tiempos revueltos.
Sara Serna
Sara Serna es tal vez la mayor exponente del collage colombiano actual, esta artista de Medellín los viene realizando desde hace siete años, cuandio vio el trabajo del brasilero Eduardo Recife y decidió que ella también podía hacer composiciones recortando y pegando todo tipo de imágenes y materiales.
Empezó entonces la búsqueda por definir un estilo propio, que hoy es un trabajo lleno de referencias dedicadas a la mujer. Sara se vale de recortes de revistas antiguas que recolecta cada que puede, especialmente cuando viaja, porque en Medellín no es muy fácil conseguirlas. Los mezcla con diversas telas, papeles, hojas o flores secas y otros materiales como pintura.
Las imágenes de mujeres parten de su afinidad hacia el feminismo y de cuestionarse sobre la situación de las mujeres, desde lo que ve y lo que vive ella misma. Por eso también le interesa rescatar la feminidad y delicadeza en sus collages y fanzines, ediciones que publica desde hace cuatro años y que son reconocidos por su cuidado y hermosura.
Sara ya ha sido invitada a colaborar con artistas de todo el mundo, además organizó el año pasado la exposición ‘Corta y Pega’, en Medellín, que reunía el trabajo de personajes que exploran esta técnica en toda Colombia. Ha llevado el collage a la animación (cut out) y para estar pendiente de su trabajo y tal vez asistir a uno de sus talleres puede seguirla aquí.
María Camila Duque
Llegó al collage por despecho: hace cinco años, mientras estudiaba Arquitectura, cortar y pegar papel se convirtió en la mejor terapia para superar un desamor y hoy tiene una relación apasionada y fructífera con esta técnica.
Su pasión por fragmentar imágenes para crear muchas otras se alimenta de la literatura y de su obsesión por el cuerpo humano. Sus recortes provienen de enciclopedias de arte, biología y cultura general, también utiliza tintas, colores y acrílicos. No hay un concepto específico o recurrente que María aborde, más bien sus trabajos responden a fragmentos literarios de novelas o cuentos que le gustan y que la cautivan de algún modo.
Desde hace tres años edita junto con Lucas Vargas el fanzine ‘Paradoja’, dedicado al collage y la literatura, el cual publica creadores de todo el país. Son fanzines temáticos con convocatorias abiertas; el último, por ejemplo, dedicado al miedo, contó con el trabajo de 65 colaboradores. Estos fanzines también son pensados como collages, una superposición de textos e imágenes que conversan entre ellos y además muestran la variedad de estilos en torno a una técnica que parece atravesar un buen momento en el país.
No deje de seguir su trabajo y esté pendiente de las próximas convocatorias de ‘Paradoja’, que ya va por el número seis.
Dany Table Boat
Daniela se juntó en el colegio con otros amigos a los que les gustaban el cómic y la ilustración y terminaron conformando un grupo de dibujo que alcanzó a colaborar con Colombian Trash, un conocido fanzine de Bogotá de finales de 2000.
Le gusta crear personajes, ya sean animales, monstruos o personas; son muñecos inspirados por la estética ‘kawaii’ que detrás de su ternura y colorido esconden en su vestuario referencias al oscurantismo, un reflejo de los seres humanos que ocultan algo en su interior a pesar de mostrar su mejor cara.
Daniela hace parte de Colmillo, un proyecto de edición de fanzines que publica constantemente, y en formatos novedosos, los trabajos de ilustradores de varias partes del país y América Latina. La gente de Colmillo se mueve un montón, además del oficio editorial, organizan ferias y exposiciones y ha permitido a Daniela producir publicaciones de manera concreta, pues su primeros fanzines no pasaron de experimentos personales.
Ahora anda trabajando en un par de cómics sobre enfermedades extrañas, como el Trastorno de identidad de la integridad corporal (BIID) que lleva a que las personas quieran cortar sus extremidades porque sienten que no les pertenecen. No se pierda el escabroso resultado y otras publicaciones de Daniela y Colmillo.